estar triste es una chinga. tienes que acordarte de llorar, de gritos apagados en las noches, desesperado. caminar por la calle raspando las paredes... es peligroso (sin contar los raspones), pues no puedes levantar la mirada (estar triste y caminar erguido es de mal gusto), pueden atropellarte en cualquier momento (no dejarte atropellar cuando estás triste está prohibido por ciertas leyes en norteamérica), te cagan más fácil las palomas (estar inclinado y caminar más lento es, en idioma palomino "cágate en mí o morirás"), en pocas palabras, no es nada práctico ni sirve para nada, pero es inevitable.
lo peor, hace alrededor de un mes, que estoy tratándome con un psicólogo online, no pregunten, no les voy a decir quién es ni de donde salió, lo contacté por recomendación de un buen amigo mío que cree que ver a un psicoanalista te facilita la vida y produce orgasmos 30% más placenteros y hasta un 47% más largos. le escribí un correo larguísimo, con detalles que espantan tipo "y los vellos de mi brazo son prácticamente escasos, miden 1 cm en promedio y la distancia media entre unoy otro es de 2cm, son delgados"
resultó ser fan del blog (como todo mundo dice ser, seguro que sólo me había visto comentando en el blog del salaverga o del chidoguán pero para quedar bien dice "ay sí soy tu fan, tralalalá); no me cobra, dice que todavía no sabe como, sólo nos mandamos mails y es la cosa más deprimente del mundo, es más; hace un mes (un día antes de empezar el tratamiento) yo era la persona más feliz del mundo, mi vida estaba en movimiento, confiaba en la importancia de la cultura, en el amor, en el sexo entre adolescentes como método de subsistencia de la especie, en la poesía y en las caricaturas japonesas, era un optimista como mariano osorio (por fortuna no sabía quién era), me gustaba la cumbia y el jazz, era un ecléctico, incluso veía la tristeza como un bello método de creación, como un estado hipnótico de magnificencia —sólo los más tristes pueden convertirse en los más grandes— pensaba... pero desde que me terapean he perdido la confianza en los demás, en la vida en sí, en el poder del ser humano, en la utilidad espiritual del arte, en los vegetarianos, en ren y stimpy, ha perdido el amor por los pequeños detalles, ya no me gusta ver a os perros levantar una pata para orinar ni me despierto saboreando con gusto el cobre matutino. no veo más futuro para el ser humano que el de la desdicha y la destrucción, ¡no lo hay! nunca ha existido, somos todos unos simios maniáticos with the need to kill, re´mos lloramos y creemos que somos geniales, pero la realidad es que esta demoníaca especie ya está muy vieja, y está tan viciada que no tiene escapatoria, hemos destruido todo lo que hemos podido porque nunca hemos escogido bien; no tenemos la capacidad de hacerlo. perdí pues, la confianza en el ser humano, el amor por la naturaleza, las ganas de comerme los mocos (ahora lo hago sólo por inercia, igual que respirar), perdí la idea que tenía de vida... perdí todo, me perdí sobre todo...
hice una denuncia, el maldito psicólogo me encerró en un camino sin salida, el de una realidad inminente que me aplastó como si no estuviera aplastado desde que fui concebido y después de un brevísimo juicio (el juez estaba de buenas), resolvieron que tengo razón, el psicólogo estaba en deuda conmigo, es indecente hacerle eso a alguien (iba a decir inhumano, pero ese término está todo cuatrapeado)... pero, como la terapia no se me cobra, no hay manera de hacerlo pagar indemnización (o sea con dinero pues...) tiene que darme terapia online gratis por 5 años, si no lo hace irá a la cárcel, así que lo más seguro es que yo muera de tristeza y me seque como un charquito al sol.
saqué mis viejos discos de corcobado, los boleros enfermos de amor, puse a san pascualito, a real de catorce, ayer me dormí escuchando a rbd, son buenos para agarrarse a llorar hasta quedarse dormido de cansancio. estoy leyendo a corín tellado, porque en un arranque de tristeza quemé todos mis otros libros.
no le contesto el teléfono a casi nadie, sólo a quienes me hablan para ofrecerme trabajo, es horrible, entrevista tras entrevista rechazado, por mi aspecto descuidado y lo peor, se burlan de mí. la última vez, pedía trabajo de payaso patiño y me rechazaron porque el maquillaje se me resbala de los cachetes por el caudal de lágrimas ¿qué puedo hacer?
ya no hallo refugio ni en las risas de los niños que vienen al parque en donde ya no puedo fumar porque es pecado. aunque viéndolo bien fumar donde hay niños es una falta de repeto, los niños no tienen desarrollado ningún sentido listo para apreciar las bondades del tabaco, es un desperdicio... aunque realmente no fumamos tabaco, lo peor del caso es que es sólo 40 por ciento de los cigarros comerciales es tabaco y lo demás es perfume y pipí de toro. la pipí de toro es barata. lo chistoso es que hay toros que se alimentan con popó de pollo... carajo, el mundo está de cabeza, lo bueno es que sólo es del ecuador para abajo. aunque los que viven debajo del ecuador aseguran lo contrario, el caso es que por algo ellos quedaron abajo oficialmente, a lo mejor porque estar de cabeza no es tan malo, preguntémosle a san antonio, qué solo tiene poderes de cabeza, seguro que es lindo tener poderes, aunque yo de eso qué voy a saber, si el único poder que tengo es el de hacer que todo se torne gris como elefante.
a casi nadie le importa un pepino mi tristeza y hasta les parece divertida. ya verán cuando sean mis vecinos y no puedan dormir porque toda la noche me la paso cantando canciones de nosotrash y el gato que vive en el balcón las corea, ¡si no fuera un gato! seríamos tan felices...
en fin, estar triste es una chinga, hasta eso hay que estar ejercitando para no generar hemorroides por el esfuerzo.
lo peor, hace alrededor de un mes, que estoy tratándome con un psicólogo online, no pregunten, no les voy a decir quién es ni de donde salió, lo contacté por recomendación de un buen amigo mío que cree que ver a un psicoanalista te facilita la vida y produce orgasmos 30% más placenteros y hasta un 47% más largos. le escribí un correo larguísimo, con detalles que espantan tipo "y los vellos de mi brazo son prácticamente escasos, miden 1 cm en promedio y la distancia media entre unoy otro es de 2cm, son delgados"
resultó ser fan del blog (como todo mundo dice ser, seguro que sólo me había visto comentando en el blog del salaverga o del chidoguán pero para quedar bien dice "ay sí soy tu fan, tralalalá); no me cobra, dice que todavía no sabe como, sólo nos mandamos mails y es la cosa más deprimente del mundo, es más; hace un mes (un día antes de empezar el tratamiento) yo era la persona más feliz del mundo, mi vida estaba en movimiento, confiaba en la importancia de la cultura, en el amor, en el sexo entre adolescentes como método de subsistencia de la especie, en la poesía y en las caricaturas japonesas, era un optimista como mariano osorio (por fortuna no sabía quién era), me gustaba la cumbia y el jazz, era un ecléctico, incluso veía la tristeza como un bello método de creación, como un estado hipnótico de magnificencia —sólo los más tristes pueden convertirse en los más grandes— pensaba... pero desde que me terapean he perdido la confianza en los demás, en la vida en sí, en el poder del ser humano, en la utilidad espiritual del arte, en los vegetarianos, en ren y stimpy, ha perdido el amor por los pequeños detalles, ya no me gusta ver a os perros levantar una pata para orinar ni me despierto saboreando con gusto el cobre matutino. no veo más futuro para el ser humano que el de la desdicha y la destrucción, ¡no lo hay! nunca ha existido, somos todos unos simios maniáticos with the need to kill, re´mos lloramos y creemos que somos geniales, pero la realidad es que esta demoníaca especie ya está muy vieja, y está tan viciada que no tiene escapatoria, hemos destruido todo lo que hemos podido porque nunca hemos escogido bien; no tenemos la capacidad de hacerlo. perdí pues, la confianza en el ser humano, el amor por la naturaleza, las ganas de comerme los mocos (ahora lo hago sólo por inercia, igual que respirar), perdí la idea que tenía de vida... perdí todo, me perdí sobre todo...
hice una denuncia, el maldito psicólogo me encerró en un camino sin salida, el de una realidad inminente que me aplastó como si no estuviera aplastado desde que fui concebido y después de un brevísimo juicio (el juez estaba de buenas), resolvieron que tengo razón, el psicólogo estaba en deuda conmigo, es indecente hacerle eso a alguien (iba a decir inhumano, pero ese término está todo cuatrapeado)... pero, como la terapia no se me cobra, no hay manera de hacerlo pagar indemnización (o sea con dinero pues...) tiene que darme terapia online gratis por 5 años, si no lo hace irá a la cárcel, así que lo más seguro es que yo muera de tristeza y me seque como un charquito al sol.
saqué mis viejos discos de corcobado, los boleros enfermos de amor, puse a san pascualito, a real de catorce, ayer me dormí escuchando a rbd, son buenos para agarrarse a llorar hasta quedarse dormido de cansancio. estoy leyendo a corín tellado, porque en un arranque de tristeza quemé todos mis otros libros.
no le contesto el teléfono a casi nadie, sólo a quienes me hablan para ofrecerme trabajo, es horrible, entrevista tras entrevista rechazado, por mi aspecto descuidado y lo peor, se burlan de mí. la última vez, pedía trabajo de payaso patiño y me rechazaron porque el maquillaje se me resbala de los cachetes por el caudal de lágrimas ¿qué puedo hacer?
ya no hallo refugio ni en las risas de los niños que vienen al parque en donde ya no puedo fumar porque es pecado. aunque viéndolo bien fumar donde hay niños es una falta de repeto, los niños no tienen desarrollado ningún sentido listo para apreciar las bondades del tabaco, es un desperdicio... aunque realmente no fumamos tabaco, lo peor del caso es que es sólo 40 por ciento de los cigarros comerciales es tabaco y lo demás es perfume y pipí de toro. la pipí de toro es barata. lo chistoso es que hay toros que se alimentan con popó de pollo... carajo, el mundo está de cabeza, lo bueno es que sólo es del ecuador para abajo. aunque los que viven debajo del ecuador aseguran lo contrario, el caso es que por algo ellos quedaron abajo oficialmente, a lo mejor porque estar de cabeza no es tan malo, preguntémosle a san antonio, qué solo tiene poderes de cabeza, seguro que es lindo tener poderes, aunque yo de eso qué voy a saber, si el único poder que tengo es el de hacer que todo se torne gris como elefante.
a casi nadie le importa un pepino mi tristeza y hasta les parece divertida. ya verán cuando sean mis vecinos y no puedan dormir porque toda la noche me la paso cantando canciones de nosotrash y el gato que vive en el balcón las corea, ¡si no fuera un gato! seríamos tan felices...
en fin, estar triste es una chinga, hasta eso hay que estar ejercitando para no generar hemorroides por el esfuerzo.